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jueves, 28 de febrero de 2013

LAS MUJERES VAN EN PAREJA AL BAÑO: EXPLICACIÓN


Para todos los que os consumido el alma, y os ha quitado el sueño el sueño alguna vez, aquí os dejo los motivos más habituales por los que las tías van al baño de dos en dos:


1. COTILLEAR: tan fácil cómo eso. Hay cierto tipo de féminas que no pueden callarse ni debajo del agua (ved que no me he incluido), y sienten un irrefrenable ansia de cotillear sobre algo en ese momento. Normalmente este hecho se suele dar en bares de copas,garitos, pubes o discotecas, donde está la música a todo trapo; por lo que el secretismo que requiere ese cotilleo se ve impedido por el volumen de la música, y lo más importante, por que hay que alejarse de la víctima que se va a despellejar: "¿Has visto que mal le queda el vestido a Maripili?" "¿Te fijaste como nos miraba esa tía? Menuda zorra" "Que bueno está Manolito, le voy a entrar"

2. RETOCARSE: después de haber bailado, como si no hubiese un mañana, el "Gangnam Style" sobre una tarima, necesitas un retoque. Recomponer el vestuario que ha perdido su ubicación primigenia durante el estribillo, y volver a su sitio la minifalda y las medias; que llevas la primera bajo los sobacos y las segundas en la punta del culo. Al mirarse al espejo se dan cuenta de que también deben meterse las bufas dentro del sujetador, que con tanto galope al ritmo de "op, op, op" llevan la mitad del pechamen fuera de su alforja. Secarse con el secador de manos todo el sudor de su lustrosa e hiperlisa melena, pero que ahora se parece más a un nido de arañas. Y ya que estás: un poco de "gloss" en los labios, máscaras de pestañas sin piedad y, como no, la raya del ojo en modo Amy Winehouse, que es la marca de la casa para chonizarte al 300%. Para todo esto, claro está, necesitas una ayuda de cámara, o dos.

Aquí haré un inciso, y diré que una vez fui cruel, muy cruel:

Hacía cola en un baño de un garito de F. Habían pasado 10 minutos y nadie salía de allí. Por fin se abre la puerta, y veo a una pava gorda cual manatí, fea con avaricia, embutida, marcando lorza, en un vestido de vinilo malva, con una cremallera en el pecho, que lleva abierta hasta el ombligo en modo "busco a Jackssss..." y pintarrajeada en modo "kabuki". Semejante esperpento hizo que saltase el resorte del  hijoputismo en mi cabeza, y salí corriendo de allí al grito de: ¡¡¡TROLL EN LAS MAZMOOOORRAAAAS!!! Nunca había visto a mis amigas reírse tanto con una parida mía.


3. COMPAÑIA: todos sabemos que en los baños de tías siempre hay una cola interminable, por lo que nunca sabes cuánto tiempo vas a estar allí, a mí incluso han llegado a salirme canas, por lo que te preparas: bebida, tabaco (cuando se podía fumar) y el teléfono en abierto para comunicaiones (Charlie, Charlie para Sierra, ¿me copias? El grupo cambia su ubicación a bar irlandés de la esquina) y a tu amiga para que te dé palique. Esto me lleva al 4º punto.


Baño de un restaurante donde
 ya están entrando en el futuro de los baños para chicas


4. BINOMIO: siempre se tiene una amiga favorita, más que amiga es tu binomio (os compenetráis al 100%, os entendéis con una mirada). Pues bien, haces un gesto a tu binomio y tomáis rumbo "al fondo a la derecha". La limpieza y la privacidad en los baños públicos es harto cuestionable. Por ese motivo te llevas a tu amiga en modo centinela-sherpa: mientras tú haces auténticas virguerías por no salpicarte con las meadas que hay en el suelo (que digo yo, que ya hay que ser lerda o ir muy tajada para apuntar fuera desde esa distancia), ni tocar nada; tu amiga está apoyada en la puerta, por que ésta no tiene pestillo, sujetando tu abrigo, tu cubata, tu bolso, del cual te dará un cleenex, por que, por supuesto, no habrá papel higiénico, mientras grita a las de fuera: "¡Que está ocupado, cooooñoooo!". Luego, se intercambian los papeles: ella te pasa todos tus aperos, y te da los suyos. Trabajo en equipo. 

5. HACERSE FOTOS: ahora está muy de moda. Hace unos años, este punto no lo habría incluido aquí, pero es lo que hay. Y claro, hasta que salga perfecta...imagínate. Que se vea bien el escote, los morritos que me acabo de retocar; que no salga el zurullo flotando que acabo de jiñar,  que se vean mis nuevas extensiones, que llevo una minifalda "R.C." (a ras de coño), y unos taconazos de infarto pero sin verse la plantación de tampones sobre la que estoy posando (si es que las tía SON muy, muy, pero que muy  cerdas)... y claro, todo esto lleva su tiempo.

6. MEAR (o desbeber): como dice mi binomio "para saber beber, hay que saber mear". Y así es. Cada X tiempo hay que ir a hacer hueco. DE ahí que las niñatas vayan siempre borrachas como piojos: por que no van al baño a mear. Hay gente, la que menos (y en este grupo, sí me incluyo), que vamos al baño a mear. Yo, si no tengo a mi binomio, suelo ir sola (digo suelo, por que siempre hay alguna amable amiga del grupo que te dice: yo también vooooyyy!!!), por aquello de ser más rápida y eficaz ("Si quieres ir rápido camina solo, si quieres llegar lejos ve acompañado"). Un "tocar y salir" en toda regla. Cosa que suele dejar perplejas a las otras féminas que se hacinan haciendo cola: que entres, y que en menos de 45 segundos estés fuera. 

Espero que esta entrada les haya quitado esa inquietud que genera, sobre todo a los tíos, el tema de que las tías van al baño de dos en dos.Puede que se den más casos y que se escapen a mi conocimiento. Pero si es así, ruego me ilustréis.

Saludos,

S.



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